APLICACIONES DE LA ROBÓTICA E INTELIGENCIA ARTIFICIAL EN EL SECTOR AGROALIMENTARIO
Gran acogida en el Foro Nacional sobre Aplicaciones robóticas e inteligencia artificial aplicada al sector agroalimentario que se celebró el 14 de septiembre en CIFP VIÑALTA PALENCIA, organizado por el ICE. Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León con la colaboración de ITAGRA.CT.
Se contó con la presencia de entidades y empresas como: Agerpix Technologies, Bodegas Familiares Matarromera, Naïo Technologies, AG-Group, Meropy, ANSEMAT, CSIC, VITARTIS- Asociación de la Industria Alimentaria de Castilla y León, NODDO | Red de Centros Tecnológicos y nosotros ENVO-DAN ApS.
Durante dicha jornada se asistió a varias ponencias, muy interesantes todas ellas y de gran importancia para el futuro de la agricultura. También se realizaron demostraciones en campo donde pudimos aprender la importancia que tienen las nuevas tecnologías para la mejora de la eficiencia y productividad en la agricultura y en todo el sector agroalimentario. El futuro necesita de todos nosotros para que la agricultura y el mundo rural siga adelante.
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La Agricultura 4.0 es el conjunto de tecnologías orientadas en la digitalización de los procesos agrícolas.
En la agricultura moderna los nuevos retos son la sostenibilidad de las explotaciones, la eficiencia para obtener rendimientos adecuados, la gestión del agua, minimizar el impacto medioambiental, la reducción de fitosanitarios, el bienestar del suelo, la gestión de los recursos, el desarrollo rural y el relevo generacional entre otros.
Actualmente la agricultura está sometida a una fuerte presión, mayormente por el aumento de la población mundial, la escasez de recursos naturales y el cambio climático.
La agricultura 4.0 es un gran aliado, ya que supone un aumento en la productividad de los cultivos, mejora el proceso de toma de decisiones a la hora de gestionar los cultivos en cuanto a humedad, nutrientes, plagas, etc., reduce le impacto de las prácticas agrícolas en el medio ambiente reduciendo, el uso de químicos, además de reducir costes como luz, agua, combustible, etc.
Para lograr una agricultura más sostenible, es necesario:
- Anticiparse a los cambios, reconocerlos, aceptarlos, planificarlos y actuar.
- Identificar los recursos y las limitaciones: desarrollar métodos para utilizar los recursos y superar las limitaciones.
- Maximizar la calidad en cada paso del proceso.
- Integrar los procesos de producción de alimentos con los procesos biológicos y ecológicos.
- Reducir el uso de técnicas no renovables que son perjudiciales para el medio ambiente, los agricultores y los consumidores.
- Beneficiarse del conocimiento y la información de los agricultores para fortalecer y motivar a las próximas generaciones.
- Aprovechar la capacidad de las personas para colaborar y resolver problemas comunes de agricultura y recursos naturales (recopilando información sobre plagas, riegos).
- Investigar modelos de agricultura sostenible, como la agricultura ecológica, la biodinámica, la permacultura y la producción integrada.
El futuro de la agricultura es muy prometedor y se enfrenta a varios retos y tendencias. He aquí algunos aspectos clave del futuro de la agricultura:
Prácticas agrícolas sostenibles: La sostenibilidad será un tema central en el futuro de la agricultura.
Los agricultores seguirán adoptando prácticas que reduzcan el impacto medioambiental de la agricultura, como la siembra directa, la agricultura de precisión y el uso de cultivos de cobertura para mejorar la salud del suelo.
Integración de la tecnología: La agricultura está cada vez más avanzada tecnológicamente. Esto incluye el uso de drones para supervisar los cultivos, tractores y maquinaria autónomos, agricultura de precisión e Internet de las Cosas (IoT) para la recopilación de datos en tiempo real. Estas tecnologías pueden ayudar a aumentar la eficiencia y reducir los residuos.
Adaptación al cambio climático: La agricultura tendrá que adaptarse a los retos que plantea el cambio climático, como el aumento de los fenómenos meteorológicos extremos, la modificación de las estaciones de crecimiento y los cambios en los patrones de plagas y enfermedades. Esto puede implicar el desarrollo de nuevas variedades de cultivos y prácticas agrícolas que sean más resistentes a estos cambios.
Agricultura digital: El uso de macrodatos, análisis e inteligencia artificial en la agricultura seguirá creciendo. Los agricultores pueden tomar decisiones más acertadas con la informacion sobre siembra, riego y protección de cultivos analizando grandes conjuntos de datos e información en tiempo real.
Producción sostenible de alimentos: Cada vez se hará más hincapié en la producción sostenible de alimentos. Esto incluye reducir el desperdicio de alimentos, aplicar sistemas de agricultura circular y ecológica y adoptar métodos de envasado y distribución respetuosos con el medio ambiente.
Debemos tener en cuenta la interfaz rural y proteger su desaparición
Interfaz rural-urbana: La interfaz entre las zonas rurales y urbanas será cada vez más crítica a medida que crezcan las ciudades. Será importante equilibrar la necesidad de desarrollo urbano con la preservación de las tierras agrícolas y el apoyo a las comunidades rurales.
Educación y mano de obra: El futuro de la agricultura requerirá una mano de obra bien formada y con conocimientos tecnológicos. Los programas de educación y formación tendrán que adaptarse para dotar a los futuros agricultores de las competencias necesarias.
En general, el futuro de la agricultura estará marcado por una combinación de innovación tecnológica, sostenibilidad medioambiental y adaptación a los cambiantes retos mundiales. Se trata de un campo dinámico con un papel crucial a la hora de abordar algunos de los problemas más acuciantes de nuestro tiempo, desde alimentar a una población creciente hasta mitigar los efectos del cambio climático.
En particular, la agricultura ecológica nos permite mantener una sostenibilidad medioambiental, reducir el uso de productos químicos que dañan el medio ambiente, sino también al agricultor y al consumidor. Mantener la salud del suelo. Tener biodiversidad. Aumentar el beneficio para la salud. Una mayor calidad de los alimentos, y un gran apoyo a la agricultura local, entre otros.
El futuro de la agricultura se observa con la promesa de prácticas cada vez más sostenibles, con una tecnología de vanguardia donde los datos, su observación, estudio y mantenimiento nos ayudarán a entender y mejorar los cultivos. Donde innovación y sostenibilidad deben ir unidos. Y donde la educación es importante, tanto para preservar el mundo rural como para su futuro.
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Ole Bo Jensen, Propietario y CEO de ENVO-DAN